´´Puede suceder que muy bien que la
teoría clásica represente el camino que nuestra economía debería seguir; pero
suponer que en realidad lo hace así es eliminar graciosamente nuestras
dificultades. Tal optimismo es el causante de que se mire a los economistas
como cándidos que, habiéndose apartado de este mundo para cultivar sus
jardines, predican que todo pasa del mejor modo en el más perfecto posible de
los mundos a condición de que dejemos las cosas en libertad.’’ (Keynes, 1936)
Leyendo
la teoría general de la ocupación, el interés y el dinero, he caído en la cita
anterior, la que considero merece toda nuestra atención, los neoclásicos
(clásicos para Keynes) han logrado mantener la posición y dominio de su teoría
económica a pesar del realismo ingenuo e irracional de los supuestos en los
cuales se fundamentan, ¿y por qué? Esta es una cuestión que nos introduciría a
un debate muy amplio, que no corresponde a este escrito, no obstante, hay que
señalarlo, puesto que dicha corriente se ha fundado bajo la concepción de un
homo economicus que busca maximización y podría tomarse el supuesto verdadero
en un mundo utópico, con un sistema económico armonioso logrado a través de un
mercado libre que alcanza un nivel de producción y empleo pleno, es aquí donde
Keynes crítica y con ello ha logrado toda mi atención, su pensamiento se
aproximó a la realidad, a lo que implica el verdadero uso de la palabra
racionalidad económica.
De
esta manera, Keynes recalca que la corriente clásica se ha ocupado en menor
medida por la teoría de la ocupación real, mostrando que algunos de los
postulados establecidos sobre este aspecto, carecían de sentido, ahora bien, si
nos diéramos a la tarea de realizar una radiografía del mundo actual,
encontraríamos que no estaba fracturado para nada su pensamiento, el cuál hoy
día ya es evidente. Así pues, es el segundo postulado de la escuela
marginalista a la cual el autor hace más objeciones que son realmente validas, como
por ejemplo, creer que aumento en los
precios y/o costos de vida a un mismo nivel de salarios nominales disminuirá la
oferta de trabajo, a pesar de un alza en los precios de las mercancías por
consiguiente el incremento en el costo de vida en la conducta real no genera
tal disminución porque en dichas condiciones por el contrario de abandonar los
trabajos, el factor mano de obra se aferra a su empleo, esto está claramente
ejemplificado en lugares como Dubái donde a pesar de los costos de vida tan
altos y los salarios tan bajos a los que se ven sometidas las personas, los
empleados siguen laborando ya les es difícil encontrar otros empleos; ‘El banquero Gkiokas, quien posee amplia experiencia
internacional en el campo de los negocios financieros escribió hace tres años un artículo ´´La
esclavitud hoy en día en los países del Golfo´´. Entre otras cosas Gkiokas
decía: El premio por su trabajo agotador (refiriéndose a los peones-esclavos
contratados en Dubái) son 5 dólares al día en condiciones deplorables y se ven
obligados a aceptarlos.’ (Berlín, 2016) . De lo anterior
también se destaca otra objeción que planteada por Keynes ya que él no acepta
que se considere que el nivel general de los salarios reales estén directamente
determinados por convenios, evidentemente no sucede, la conducta real deja
entrever que los salarios base son implantados por el gobierno y aunque se
debata su incremento o disminución con los diferentes sindicatos nunca estos
serán a favor de los empleados, países como la República Democrática del Congo
dan cuenta de los salarios tan miserables que están establecidos para el factor
mano de obra, por nombrar solo a uno de tantos, porque la lista es larga.
Por
otra parte, Keynes también cuestiona que los clásicos no tomen en cuenta la
existencia de lo que él llama la desocupación involuntaria; es decir, que se
creyera que solo podía existir dos tipos de desocupación la aparente
(transición de un empleo a otro) y la visible (negación a un nivel de
remuneración), esto para un mundo ideal, sin embargo, Keynes trasciende a lo
que realmente se vive en el mundo y hoy más claro que nunca, y es la existencia
de desempleo en donde la mano de obra calificada o no estaría dispuesta a
vender su fuerza de trabajo pero no lo hace a razón de falta de demanda,
vacantes, etc. ‘’Los hombres se encuentran
involuntariamente sin empleo cuando, en el caso de que se produzca una pequeña
alza en el precio de los artículos para asalariados, en relación con el salario
nominal, tanto la oferta total de mano de obra dispuesta a trabajar por el
salario nominal corriente como la demanda total de la misma a dicho salario son
mayores que el volumen de ocupación existente.” (Keynes, 1936) .
En conclusión, se puede ver cómo una vez más los postulados
de la economía clásica o neoclásica son sometidos a critica tras la
irracionalidad de los postulados planteados los cuales se alejan de la
realidad, y por supuesto el planteamiento de John Maynard Keynes muy acertado,
verídico y realista, que nos acerca a los verdaderos fundamentos y dificultades
que pertenecen al estudio de la economía, y no simplemente a la idealización de
lo que esta debería ser.
Referencias
Berlín, U. (1 de diciembre de 2016). Lo que somos.
Obtenido de lo que somos: http://loquesomos.org/dubai-la-de-los-esclavos/
Keynes, J. M. (1936). Teoría
general de la ocupación, el interés y el dinero. Harcourt, New York:
Fondo de cultura económica.
Me parece un buen texto, es bastante explicito con los argumentos que se plantean. es importante precisar que Keynes rechaza el segundo postulado con la afirmación de que una disminución del salario real, por un aumento en los precios, cuando los salarios nominales permanecen inalterados, forzaría una disminución de la oferta de trabajo al nivel del salario corriente, abajo del volumen de empleo anterior a la subida de los precios. Keynes plantea que cuando los salarios disminuyen, los ofertantes de trabajo no reducirán dicha oferta, e incluso estarían dispuestos a trabajar por un nivel de salario más bajo, es por esto la importancia del concepto de desempleo involuntario, puesto que en el mundo real como se plantea en el texto la mayoría de personas no están empleadas debido a carencia de oportunidades laborales y creación de nuevas empresas las cuales generen nuevas vacantes que permitan aumentar el nivel de ocupación. Es así entonces, que la teoría clásica toma lugar en un mundo inexistente en donde sus postulados e ideologías están basadas principalmente en generar riqueza.
ResponderBorrarHola
ResponderBorrarMe parece que tu texto es muy completo puesto que deja ver como los postulados clásicos no son aplicados en la práctica dentro del mercado ya que con planteamientos como la racionalidad de los actores económicos queda entre dicha, en la verdadera interacción del mercado. Por ende creo que haces un buen contraste entre lo planteado por Keynes y lo dicho por los clásicos.
Es un texto muy bien argumentado en cuanto a los postulados realizados por la teoría clásica y lo que trae consigo algunas inconsistencias que el economista británico nombra en forma de critica. De igual modo cabe recalcar que como lo dice Keynes de lo que hablan los clásicos es de salario nominal mas no real como ellos lo describen y que como en la cotidianidad se percibe, lo que vive un asalariado prácticamente obligado a emplearse por un salario menor de lo que espera y peor aun, con ingresos que no alcanzan a cubrir las necesidades básicas, ni mucho menos tienen la capacidad de escoger o de exigir un salario, simplemente lo acepta o se queda desempleado sin derecho a poder adquirir tales bienes y servicios. Teniendo en cuenta también que como solución por parte del Keynesianismo a bajar el desempleo ocurre el problema de la demanda efectiva es decir, cuando el ingreso de los trabajadores no va todo destinado a consumo sino que destinan una parte al ahorro y para ello, para que se logre un equilibrio, se debe aumentar la inversión por parte de los empresarios para que aumente la producción a través de un aumento en el nivel de ocupación y por ende mayores ingresos que permitan cubrir con los productos que no fueron obtenidos por los empleados en periodos pasados y así seguir estimulando la inversión de las empresas sin olvidar que el incentivo a invertir dependen de la relación entre la curva de eficiencia marginal del capital y de la tasa de interés por prestamos entre otros y así dada la propensión a consumir y la tasa de la nueva inversión, existe un nivel de ocupación compatible con el equilibrio.
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