En el siguiente Escrito vamos a relacionar un breve articulo de la revista “Portafolio” donde
se analiza la situación que pasa América latina de cara a la renovada guerra comercial entre
Los Estados Unidos y China, con los postulados de la doctrina económica clásica y la
keynesiana, destacando ciertos puntos a tener en cuenta para la diplomacia dual que deben
seguir los países de la región.
Una de las propuestas estelares de la campaña del actual presidente de los estados unidos,
pasaba por implementar un aumento en los aranceles equivalentes a aquellos que enfrentan
los productos estadounidenses en otros países. Aranceles al acero y aluminio no
discriminaron países aliados como México, que han afectado indirectamente a China,
socavando las intenciones de este ultimo de sortear la aduana y las regulaciones industriales
del gobierno de los Estados Unidos. Quizás medidas como estas son necesarias para darle
el empujón que necesitan las industrias nacionales en algunos sectores estratégicos para
competir directamente con los actores extranjeros en el mercado local, como habría
sugerido Keynes para solucionar problemas como el desempleo, que, aunque para enero del
2025 era baja (de un 4%) se crearon menos empleos de los que se esperaba, según un
artículo de Telemundo (2025).
Y si analizamos con más detalle la rivalidad comercial entre EE.UU. y China en América
Latina, podemos decir que la asignación eficiente de recursos que supone el liberalismo
clásico es contraproducente para los intereses de EE.UU. ya que los malabares que han
hecho las empresas chinas para trasladar a México su producción con el fin de evitar los
aranceles estadounidenses han inundado los mercados estadounidenses con productos más
competitivos. Esto también ha alertado a la presidenta mexicana Claudia Sheinbaum, quien
anunció proyectos para reducir las importaciones chinas y fomentar la producción local, ya
que la perdida de la competitividad de la manufactura mexicana frente a la china es
evidente, amen de preservar el tratado de libre comercio que existe entre EE.UU. y México.
El presidente argentino Javier Milei también se ha enfrentado al dilema de fortalecer la
economía con China o mantener buenas relaciones con Estados Unidos después de la
imposición del arancel al acero, ignorando así sus promesas electorales en contra del
comunismo, pero la competitividad de la industria argentina en el sector agroindustrial
podría suponer grandes ganancias en el mercado chino, ya que su enorme población
siempre supondrá una enorme demanda, concluyendo así que sus economías son más
complementarias. Aun así uno no de los grandes objetivos de Milei es firmar un tratado de
libre comercio con los Estados Unidos, a pesar de que muchos expertos discrepan acerca
del margen de mejora de las exportaciones argentinas hacia EE. UU. Según un artículo de
DW español (2025), ya que sus economías podrían ser consideradas sustitutivas, teniendo
en cuenta que la industria energética y agrícola americana es tan competitiva como la
argentina. Según Adam Smith cada país tiene ventajas comparativas en la producción de
ciertos bienes o servicios, puede por sus recursos naturales, o su mano de obra calificada. Si
estos países se especializan en la producción de aquellos bienes o servicios en los que tiene
ventajas comparativas, se puede producir de manera más eficiente y a menor costo.
En este breve ensayo nos dimos cuenta como muchos de los grandes acontecimientos
económicos de la actualidad aun tienen respuesta desde las teorías clásicas y keynesianas,
que son capaces de explicar el comportamiento de los actores económicos, de como las
fuerzas del mercado pueden favorecer mas a los intereses de unos que de otros, y así causar
grandes pugnas por el poder del comercio internacional, como hoy lo vivimos en nuestra
región.
Bibliografía
Portafolio (2025) https://www.portafolio.co/internacional/eeuu-o-china-latinoamerica-bajo-
presion-por-escoger-un-bando-623954
Telemundo (2025) https://www.telemundo47.com/noticias/eeuu/reporte-desempleo-enero-
mandato-trump/2537138/
DW (2025) https://www.youtube.com/watch?v=AISNPtMRSB0
Es una pregunta importante que se debe plantear para los países de América latina que yacen como economías emergentes, pero también para el mundo en general. China brilla como una economía en crecimiento y con proyecciones de crecimiento que de materializarse en pocos años podrían convertirse en la primera economía mundial, por lo cual la colocan como un inmejorable socio comercial. Pero por otro lado este occidente que si bien puede no estar pasando por su mejor momento es el país más poderoso, y en estadísticas como IDH y PIB per cápita, sobre pasa a china por años luz. Lo mejor es tener relaciones comerciales con la mayor cantidad de mercados internacionales, dinamizar la economía, y no depender tanto de uno o del otro.
ResponderBorrar¿china o estados unidos? es un debate que se venido desarrollando por lo menos durante los últimos 10 años, pues para nadie es secreto que china ha tenido un crecimiento económico muy importante para especular que en el futuro esta seria la primer potencia mundial, lo cual la hace una nación muy atractiva para que los paises latinoamericanos concreten relaciones comerciales y aun mas con el tema de la "nueva ruta de la seda". Por otra parte estados unidos en la actualidad sigue siendo la primer potencia mundial y un socio comercial que por lo menos en el caso de Colombia no resulta para nada despreciable. Y aunque últimamente con el nuevo gobierno se han generado tensiones resultado de las políticas arancelarias, estas no solo pueden ser una forma combatir en la guerra comercial con china, sino que también pueden ser una medida de presión para que se haga lo que impone el "gobierno Trump" a los paises latinoamericanos en temas que no tienen nada que ver con el comercio internacional. En mi opinión si tomamos el caso Colombia se debería seguir fortaleciendo relaciones con ambas potencias, ya que históricamente se ha evidenciado que no podemos depender de un solo socio comercial.
ResponderBorrarCreo que aborda la cuestión de la dependencia económica de manera pertinente, pero tal vez podría profundizar más en cómo las políticas específicas de estos países impactan realmente en la región. El texto presenta de manera clara la tensión geopolítica en América Latina ante la guerra comercial entre EE.UU. y China, rescatando teorías económicas de los clásicos y keynesianas y los datos ofrecidos apoyan sus argumentos.
ResponderBorrarLa guerra comercial entre Estados Unidos y China es un tema que se puede abordar desde múltiples puntos de vista. Como bien sabemos, la demanda agregada es, según Keynes, el motor principal del crecimiento económico. Dicho lo anterior, creo que dentro del ensayo cabe destacar algunos puntos que inciden en esta variable. Por ejemplo, si los precios de los productos importados aumentan debido a los aranceles, esto podría reducir el consumo interno. Por otro lado, Keynes destacaba que la incertidumbre puede llevar a los empresarios a posponer decisiones de inversión, lo que frena el crecimiento económico. Es decir, que las expectativas juegan un papel muy importante dentro del análisis. Sin embargo, considero que el ensayo podría haber profundizado en otros aspectos clave de la teoría keynesiana, como el multiplicador keynesiano y el papel del Estado como estabilizador económico. Por ejemplo, el multiplicador keynesiano explica cómo un aumento inicial en el gasto (público o privado) genera un efecto cascada en la economía. En el contexto de la guerra comercial, un aumento en el gasto público en infraestructura o programas sociales podría tener un impacto multiplicador positivo, compensando la caída de la demanda privada. Además, se podría haber discutido cómo los gobiernos latinoamericanos podrían aplicar políticas keynesianas para mitigar los efectos de la guerra comercial. Por ejemplo, podrían implementar políticas fiscales expansivas, como el aumento del gasto público en sectores estratégicos, o políticas monetarias acomodaticias, como la reducción de las tasas de interés, para estimular la inversión y el consumo.
ResponderBorrarEl ensayo analiza la guerra comercial que existe entre USA y China desde las opticas clásica y keynesiana, destacando su impacto en América latina, sin embargo, la relación con los principios de Keynes es imprecisa, ya que la teoría propone la intervención estatal para estimular la demanda, no necesariamente el proteccionismo arancelario, tambien se menciona la eficiencia del libre mercado según el liberalismo de los clásicos, pero no se profundiza en cómo la realidad de latinoamericana contradice esta vision.
ResponderBorrarEl analisis es preciso al señalar las tensiones comerciales y diplomáticas en la región, pero carece de un análisis más estructurado sobre cómo la teoría económica keynesiana explicaría estos fenómenos.
El texto explica bien cómo la disputa entre EE.UU. y China afecta a América Latina, pero creo falta una visión más crítica sobre la dependencia de la región. En lugar de solo adaptarse a las reglas que imponen estas potencias, los países latinoamericanos deberían enfocarse en construir una estrategia propia. No se trata solo de elegir entre uno u otro, sino de diversificar alianzas y fortalecer la producción local. Sin una política económica clara y a largo plazo, la región seguirá siendo un espectador en lugar de un actor clave en el comercio global.
ResponderBorrarEl autor plantea una cuestión clave en la economía global. Las políticas proteccionistas, como los aranceles al acero y aluminio, pueden ser vistas como herramientas para estimular la industria nacional y reducir el desempleo. Sin embargo, la efectividad de estas medidas depende de la capacidad productiva local y del dinamismo del mercado interno. Keynes abogaría por una combinación de inversión pública y estrategias proteccionistas para fortalecer sectores estratégicos, pero sin descuidar la demanda agregada.
ResponderBorrarEl ensayo acierta en señalar que la teoría clásica, con su énfasis en la asignación eficiente de recursos y las ventajas comparativas, no siempre favorece a EE.UU., ya que permite la relocalización de empresas chinas en México, afectando la competitividad manufacturera. En cuanto a Argentina, el dilema entre fortalecer la relación con China o EE.UU. ilustra cómo los países deben considerar no solo la eficiencia económica, sino también las implicaciones geopolíticas.
El escrito aborda las tensiones comerciales entre EE. UU. y China, destacando cómo las políticas arancelarias afectan a América Latina. Se menciona cómo las ideas keynesianas de intervención estatal y protección de industrias locales, como las adoptadas por México y Argentina, pueden ser una respuesta frente a la competencia externa. También se analiza la teoría de las ventajas comparativas de Adam Smith, que explica la especialización de los países en ciertos sectores. En general, el artículo muestra cómo las teorías clásicas y keynesianas siguen siendo útiles para entender los retos económicos de la región en el contexto actual.
ResponderBorrarEl ensayo destaca un tema clave en la política económica internacional: la influencia de las grandes potencias sobre las economías emergentes de América Latina. La guerra comercial entre Estados Unidos y China pone a la región en una posición de vulnerabilidad, obligando a los países latinoamericanos a tomar decisiones complejas para equilibrar sus relaciones comerciales y mantener su competitividad. El análisis de las teorías económicas clásicas y keynesianas permite entender cómo las políticas proteccionistas, como los aranceles, pueden ser una respuesta lógica para proteger industrias locales y fomentar el empleo, aunque también pueden generar tensiones diplomáticas y económicas. La competencia entre EE.UU. y China en la región refleja cómo las decisiones comerciales deben ser cuidadosamente equilibradas con los intereses nacionales, lo que resalta la importancia de una diplomacia económica estratégica para estos países.
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