martes, 28 de agosto de 2018

La ocupación según la Teoría de J.M. Keynes



En nuestra sociedad siempre ha existido desde el punto de vista económico el problema de la escasez entendiéndose este concepto como esa incapacidad de satisfacer los deseos, y que  desde  la teoría económica se ha tratado de buscar unas posibles soluciones; es así que al hacer un recorrido a través de la historia económica entre los precursores tenemos a los teóricos clásicos, siguiendo de manera general con los neoclásicos, marxistas, y posteriormente llegando a Keynes un economista del siglo xx, que a diferencia de los clásicos, se concentra en encontrar solución al problema que se estaba presentando en  Estados Unidos en 1929 conocida también como la gran depresión, dando lugar de esta manera al pensamiento keynesiano que se basa en los conceptos neoclásicos que tuvieron en algún tiempo gran incidencia, y que aun la tiene incorporándose en modelos económicos claro está que haciendo ciertas modificaciones y Un ejemplo muy claro puede ser el modelo neoliberal, que tiene como principal condición establecer un mercado libre es decir, donde haya poca intervención del gobierno tratando de que el mercado se autorregule.
Centrándonos en los importantes enunciados hasta ahora leídos en los dos capítulos de la gran obra de Keynes llamada,”Teoría general de la ocupación, el dinero y el interés”. Podemos rescatar varias cosas: lo primero que nos recalca Keynes es que esa gran dominación por parte del pensamiento neoclásico había que analizarlo teniendo muy en cuenta que en su modo de desarrollar una teoría general lo que debía hacer era tener presente que solo se podía contar con los clásicos de una manera especial, pues a pesar de ser una teoría bien fundamentada, no se acomoda completamente a la vida real, pues esta no funcionaba al pie de la letra ya que, muchas de sus condiciones se desplomaban al aplicarlas, puesto que puede ocurrir que alguna sociedad se encuentre como siempre; con diversidad de fenómenos, lo anterior no siendo extraño ya que somos una sociedad de muchos, en donde cada uno de los individuos actuamos de manera diferente.
 Entre los postulados de la teoría clásica (neoclásica), están: que el salario es igual al producto marginal del trabajo y que la utilidad del salario es igual a la desutilidad marginal del volumen de ocupación. Supuestos que hacen alusión en primer lugar a la ocupación de los recursos disponibles (factores de producción), más específicamente el factor trabajo en donde la mayoría de las personas muchas veces no están de acuerdo a su remuneración puesto que, no creen que es lo correspondiente frente a las producciones que realizan, esto según los que ofertan la mano de obra, los cuales tratan siempre de estar enganchados a algún tipo de actividad remunerativa para así de esta manera obtener ingresos y a su vez ganarse la vida, por lo menos con las cosas más básicas para poder sobrevivir. Es así, como en nuestro país  esto aún sigue siendo un problema, el de la distribución del ingreso, muchas personas se tornan angustiosas pero a la vez sostenidas ante tal situación. Porque aunque unos no estén trabajando por cuestiones como lo dice nuestro autor a estudiar: voluntarias, involuntarias o friccionales, existirán otras que no les importara tales condiciones y estarán dispuestas a trabajar así sea por una miseria. Lo harán. Estos son aspectos muy visibles y por lo tanto no desconocidos ante la sociedad, tanto es asi que dejando a un lado las decisiones individualistas, estos trabajadores se ponen de acuerdo colectivamente fijando un salario nominal sin  la opción de reducirlo y dada una disminución de este, las ocupaciones, actividades, labores cesaran. Ahora bien, en el caso de los demandantes de recursos, se debe saber que también buscan un fin que es el de mantener mano de obra útil que deje buenas productividades a un costo bajo. Aunque creo que estos empresarios generadores de empleo deben saber que el salario a pagar debe ser suficiente para que los asalariados tengan la condición necesaria para poder comprar bienes y/o servicios de consumo, de tal manera que haya una coherencia en todo este ciclo.
Aunado a lo anterior con respecto a la oferta y demanda de recursos, existe una obstrucción de las partes en cuanto a los intereses porque de algún modo, la tendencia de ambas es distinta, por eso es que de cierto modo se busca un equilibrio para no formar discusiones. Pero lo que últimamente se ha visto es todo lo contrario un descontento por parte de los operarios. Que aunque no estudian economía son muy razonables en cuanto sus costos vida, sabiendo elegir y decidir lo que más les convenga y atraiga bienestar.
Dicho todo esto, se puede concluir que existen muchas variaciones en el contexto del mercado, donde en sentido alguno nada es constante como lo suponen los clásicos, dando como consecuencia en el caso del mercado libre, al no poderse regular, estar en la necesidad de hacer participe en  estas cuestiones de mercado y economía la intervención del Estado que a través de políticas pueda resolver variados problemas.
Bibliografía:
Keynes, J. M. (2014). TEORIA GENERAL DE LA OCUPACION, EL INTERÉS Y EL DINERO. Mexico- Buenos Aires: FONDO DE CULTURA ECONOMICA.

Cod. 104417011293










2 comentarios:

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  2. Hola...
    Dos apreciaciones, la primera; el concepto de escasez como lo ubicas,"incapacidad de satisfacer los deseos" me parece que se queda corto y fuera de contexto. Los deseos como limites y creaciones no llevan a concebirse como consecuencia de escasez. Segundo; la capacidad del Estado regular el mercado ineficiente, debe contener mas allá de políticas que ayuden a resolver los problemas que hace que el mercado no funcione, es eliminar dichas estructuras, aunque esto seguirá siendo el debate...

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