En una sociedad no demasiado
pobre, el agua y el pan no faltan casi nunca. En una sociedad rica, el oro y el
lujo faltan siempre. ¿Cómo podríamos ser felices si estamos insatisfechos? ¿Y
cómo podríamos estar satisfechos si nuestros deseos no tienen límite? A
Epicuro, por el contrario, un poco de queso o de pescado seco le parecía un
gran banquete. ¡Qué felicidad comer cuando se tiene hambre! ¡Qué felicidad
dejar de tener hambre cuando se ha comido! ¡Y qué libertad estar sometido sólo
a la naturaleza! La templanza es un medio para la independencia, de la misma
manera que ésta lo es para la felicidad. Ser temperante es poder contentarse
con poco, pero lo importante no es el poco, sino el hecho de poder y de
contentarse. Pequeño tratado de las
grandes virtudes – André Compte-Sponville.
-Dotor, dotor: ¿Adivine qué?
- ¿Qué pasó Heriberto?
-La clase de hoy se la voy a dar yo.
- ¿Ah sí?
-Sí dotorcito, es que ya le cogí el tiro al Sir, y tengo un par de cosas
que enseñarle, mejor dicho, dotor agarre butaca y pare oreja.
-A ver.
-Vea dotor, lo primero aclararle que el ahorro en la economía es una
variable dependiente, es decir, una variable residual que se obtiene del
ingreso una vez se ha hecho el consumo. Sentado esto dotor, pasemos a lo que
vinimos, o a lo que vine, -porque usted vino de malversar en el congreso-.
Keynes dotor, propone ciertos criterios o motivos que impulsan al consumidor a
abstenerse del consumo. ¿Le entramos al grano dotor?
-Al grano Heriberto.
-El primero dotorcito es la precaución por previsión a posibles
contingencias. Esto es dotor, que el consumidor se abstiene de consumir, porque
cree que algo inesperado y adverso pueda pasar, quién sabe dotor; que padezca
un achaque de salud, que un terremoto destruya su vivienda, que Vargas Lleras
gane las presidenciales., quién sabe dotor.
-Lo segundo dotorcito es la previsión; el consumidor opta por no
consumir pues cree que necesitará un nivel de mayores ingresos en el futuro,
eso es dotor como cuando yo dejé de comprar unos casetes porque tocaba pagar el
predial, -o como cuando usted dejo de comprar el cuarto automóvil porque lo
andaban investigando por supuestos desfalcos, y es que haya en el presidio se
necesita mucho billete, y más pa’ ustedes los dotores que se hacen jaulas de
oro que dizque no dejan de ser prisión-.
- ¿En qué piensa Heriberto?
-Nada dotor, guevonadas de uno, pero sigamos, sigamos.
-El tercer motivo dotor es el cálculo; esto es que los agentes
económicos, -como les dicen ustedes dotores a los clientes del changarro-,
prefieren inhibir temporalmente consumos hormiga, consumos de baja cuantía que
progresivamente reservan para posteriormente realizar un consumo de mayor
cuantía. Como cuando a la salida de aquí
del edificio me abstengo por un mes de tomarme el tinto, entonces dotor haga cuentas,
mil pesos que me gasto en el tinto diario por treinta días, dan treinta mil
pesos contantes y sonantes que luego los uso para comprarme otro gorro que el
que tengo ya está todo deshilachado. O cuando los dotores del cartel de Cali se
abstuvieron de consumir para financiarle la campaña al dotor Samper, que tiene
una espalda adelante y otra atrás, porque dijo que dizque si habían entrado
dineros ilegales a su campaña había sido a sus espaldas.
-El cuarto motivo es dotor la sensación de independencia dotor. Un buen
ejemplo es una persona recién graduada que ha conseguido un empleo pero que aún
vive con sus padres, en este caso podría guardar parte de su ingreso
absteniéndose de un consumo inmediato y consumiendo después en algún tipo de
bienes de su preferencia.
-El quinto dotor es la empresa dotor, el deseo de iniciar un proyecto de
negocios, un emprendimiento. Así pues, el individuo se abstiene de consumir
para lograr un monto que le permita la adquisición de sus primeras unidades de
capital y la consolidación de su primera inversión. Aunque dicen por ahí dotor,
que los empresarios no invierten con el dinero propio, sino con el dinero de
otros, lo que se dice el ahorro de una economía.
-El sexto dotor, y no se me duerma que esto no es el congreso y ya estamos
terminando, es el legado de una fortuna, el orgullo de transferir un monto de
dinero después de la muerte.
-El séptimo dotor, es la avaricia, esa palabra que ustedes los dotores
no conocen, abstenerse del consumo per se, satisfaciendo el deseo con el mismo
acto de la abstención. Pero en estos temas de avaricia el dotor Gerlein sabe
más que cualquiera, con todos los años que lleva clavado succionando el
presupuesto público.
- Uy el dotor ya se me quedo dormido. Se le habrá hecho que estábamos en
plenaria del senado. Pero ya lo han dicho: no hay perro malo, así como no hay
político bueno. Será echarle una ruana encima al dotor e irse a tomar un tinto.
Escrito por: Jorge Luis
Rivadeneira.
Buenas noches, Jorge.
ResponderBorrarMuy buen texto y entretenido.
Logras abarcar buena parte de la temática tocada en clase basada en el libro de la teoría general de la ocupación, el interés y el dinero (a la vez que logras ilustrarlas en la vida cotidiana); como lo son las variables subjetivas y objetivas que afectan la propensión a consumir
Interesante texto, ya que expones los factores subjetivos con una breve explicación de cada uno. Este tipo de factores se logran analizar desde diferentes miradas que tiene cada consumidor, es decir la abstención al consumo del modulo de la precaución no es igual a la de la independencia y así con todas las demás, por lo que se puede afirmar que debe primar las preferencias y cotidianidades que tiene cada ser humano.
ResponderBorrarUn texto muy entretenido, disfruto mucho esta lectura.
ResponderBorrarPor otro lado el texto apoya significativamente el temario tratado en clase, describiendo claramente los factores subjetivos para no gastar, planteados por Keynes, empleando ejemplos ilustrativos y fáciles de entender.
Adicional mente hace una crítica a situaciones del pasado y presente, que es bueno recordar para no olvidar y no acostumbrarnos a tolerar estas situaciones inaceptables.
Hola Jorge.
ResponderBorrarMuy, muy buen texto.
Expones de una forma muy clara y que además es entretenedor la forma en que lo narras. La forma en que das a entender la abstención al consumo en sus factores subjetivos y la critica social que incluyes.