jueves, 30 de agosto de 2018
Cambios en la canasta familiar colombiana
https://www.elespectador.com/economia/con-corrientazo-y-mascotas-asi-es-la-nueva-canasta-familiar-en-colombia-articulo-808414
Hola a todas y todos!!
Les comparto el vínculo de la noticia que les participé en clase, en cuanto a las modificaciones que hará el DANE para la medición de la canasta familiar colombiana.
martes, 28 de agosto de 2018
¿Revolución Keynesiana?
Por. Leonardo Fabio Muñoz
Aquí conviene
detenerse un momento a fin de entender bien el concepto de revolución, para
esto nos referiremos al libro de Tomas Kuhn “estructura de las revoluciones
científicas”, un excelente libro que nos muestra los problemas por los cuales
pasa un investigador dedicado a las ciencias físico-químicas. Es importante y
complejo hacer un símil entre la economía y las demás ciencias exactas, sobre
todo en lo que comprendemos sobre el concepto de “ciencia”, aunque a decir
verdad la decisión final la tomara el mismo economista y sus creencias
particulares. Comenzaremos por hacer una breve exposición sobre el contexto
histórico de la economía en el cual se le ha asignado la característica de
Ciencia y como a partir de esto podemos decir que el concepto de paradigma,
ciencia normal y revolución pueden ser aplicables a ella.
La historia
nos muestra que a mediados del siglo xx, las ciencias fisicoquímicas han pasado
por un fantástico desarrollo, hemos visto como han surgido inventos que nos han
cambiado la forma de ver y experimentar el mundo. Kuhn menciona que las ciencias han evolucionado gracias a
que no solo se ha presentado acumulación periódica de conocimiento, sino que es
a partir de los inconvenientes que ha tenido un científico con las teorías ya
existentes para explicar la realidad ósea que es a partir de las crisis que
presenta la ciencia normal que han surgido las revoluciones.
La ciencia
normal nos describe Kuhn está íntimamente ligada con los paradigmas, se puede
describir así “parece ser un intento de obligar a la naturaleza a que encaje
dentro de los limites preestablecidos y relativamente inflexible que
proporciona el paradigma” KUHN /52. Sin embargo, ¿ocurre lo mismo con la
economía? ¿podemos comparar a la economía con las ciencias naturales? Para responder
lo anterior debemos remitirnos a la historia.
Se puede
decir que el primer libro que da pie al estudio formal de la economía es “la
riqueza de las naciones” de Adam Smith, en el encontramos condensada toda la
información que nos permite entender la economía como un todo teórico e
instrumental. En David Ricardo hallamos que fue un genio para la abstracción y
se puede recalcar lo siguiente: “Ricardo asume que la economía política es una ciencia
y en cuanto tal está regida por leyes, de modo que la distribución del
producto de la tierra puede explicarse de manera científica”. Dudo mucho que en
la economía existan “leyes”, sin embargo, no pensaron así los economistas
precursores de los clásicos.
Es prudente
mencionar que la revolución marginalista se debió en parte por su contexto, ósea
a los resultados sorprendentes de las ciencias físico-químicas, sus
investigaciones estaban transformando el mundo, el equilibrio era la norma,
pero lo más importante era su método de investigación, el método hipotético-deductivo.
Es así como la economía apropia esta fórmula para llegar a conclusiones sobre
la realidad, la formulación de modelos, a partir de abstracciones fue su modus
operandi principal. ¿Nace así la ciencia económica? En realidad es todo una
controversia que se sigue gestando en la academia, aunque lo que es evidente es
que las ciencias fisico-quimicas se han transformado y han dejado de lado el
antiguo paradigma del equilibrio mientras la economiza se ha quedado estancada.
De lo
anterior se desprende que el estudio económico estaba obsesionado con la
medición, y por la firme creencia de la economía como ciencia exacta, es así
como Jeremy Bentham el precursor del utilitarismo menciona que es posible medir
en función de la satisfacción un determinado consumo, nace así la teoría del
valor-utilidad. Si comparamos todos estos acontecimientos con lo que nos dice
Kuhn, podemos afirmar que esta es la ciencia normal “esa empresa parece ser un
intento de obligar a la naturaleza a que encaje dentro de los limites preestablecidos
y relativamente inflexible que proporciona el paradigma” desde la economía el
paradigma neoclásico.
Entrando el
siglo 20 llegamos a autores tan importantes desde el marginalismo: Jevons,
Menger, Walras, Wiser, Von Mises y Marshall. Siendo los discípulos de estos dos
últimos los más importantes: Friedrich von Hayek y John Maynard Keynes
respectivamente. Dos posturas totalmente distintas, sin embargo una iría en contraposición
de la otras.
A pesar de
que me gustaría hablar con propiedad sobre
Keynes y contestar la pregunta del título, me es difícil con mis escasos
conocimientos sobre el autor, sin embargo, puedo decir que a parir de lo leído
en los primeros capítulos y lo visto en el documental “la batalla de las
ideas”, se siembra desde ya una revolución al pensamiento dominante y así mismo
lo expresa el autor en su obra: “la redacción para el autor ha sido, para el
autor, una prolongada lucha en la que trato de escapar a las formas habituales
de expresión, y así debe ser su estudio para la mayor parte de los lectores, si
el intento del autor tiene éxito, un forcejeo para huir de la tiranía de las
formas de expresión y pensamiento habituales” KEYNES, 11. Es un autor que
se atreve a criticar sagazmente los postulados fundamentales de la teoría
clásica respecto a la teoría de la ocupación basada en la oferta y la demanda.
Se ha mencionado la pertinencia de Keynes para la creación de la Macroeconomía
y su estado de bienestar basado en el intervencionismo estatal. Entro al curso
con gran expectación queriendo responder afirmativamente que la teoría
Keynesiana fue una revolución para el pensamiento Económico.
BIBLIOGRAFIA
Kuhn, T.S
(2002). La estructura de las revoluciones científicas. Editorial Fondo de
Cultura
Económica, decimoctava reimpresión, México D.F.
Keynes, John
Maynard. Teoría General de la Ocupación, el interés y el Dinero. Fondo de
Cultura
Económica.
1936. Capítulos 1,2.
LA TEORIA DE LA SALVACION ¿SOLO PARA MENTES DESARROLLADAS?
Algunas
de las críticas que obtuvo la teoría general de la ocupación, el interés y el
dinero de Keynes fueron en torno a sus ideas y su estilo pues en el momento y
en época, generó un nuevo punto de vista y un nuevo enfoque en la corriente
económica. Como era de esperarse, hubo críticas constructivas y a la vez,
criticas destructivas y es de estas últimas de las que hablaremos.
Cuando John Maynard
Keynes un hombre exitoso de negocios, de clase alta, influenciado por la
escuela neoclásica y graduado como
economista de la universidad de
Cambridge, quien le enseña al mercado financiero como resolver la problemática que se vive;
con sus primeras declaraciones y experimentos de unas políticas que
revolucionarían, darían un nuevo rumbo y sacarían de la crisis por la cual
atravesaba la economía de Estados
Unidos. Con esto Keynes genero un tipo de envidia y repudio por parte de otros
economistas de la época como la de Galbraith que decía: “Es una obra
profundamente oscura, mal escrita y publicada prematuramente. Todos los
economistas dicen que la han leído. Sólo lo ha hecho un puñado de ellos. Los
demás sienten el secreto remordimiento de que nunca lo harán. Una porción de su
influencia se debió a que era en gran parte incomprensible (Galbraith, 1983:
257). Galbraith afirma que un gran puñado no leerán este libro porque en su
gran mayoría es incomprensible; Mark Blaug es aún más categórico: ´La Teoría
General es simplemente un libro poco claro y mal escrito’.
Entonces ¿Para quién
escribió Keynes si ni sus colegas economistas lograban entender su mensaje el cual saco a
USA de la crisis? Keynes se caracterizó por la complejidad en sus escritos y
esto lo confirma Athanasios Asimakopulos, cuando dice: ´la teoría general no es
un libro de fácil lectura, en parte porque la naturaleza inherentemente
compleja de la materia no permite un tratamiento sencillo, y en parte porque Keynes
no se tomó (o no tuvo) el tiempo necesario para trabajar todo de manera
consistente´. Entonces para dar respuesta a la pregunta anterior, podemos
inferir que el puñado de economistas, tomaron una postura negativa y de ocio ante
la teoría general, pues no veían más que habladuría en este libro. Además,
Keynes era innovador para su época y pienso que este fue algo importante por la
cual atrajo tantas críticas.
Para mala suerte de
todos estos críticos, la corriente económica Keynesiana lleva más de 8 décadas
de vigencia lo que le generaron una gran
fama mundial, que lo llevo a inmortalizar su nombre en la historia de Estados
Unidos pues debemos recordar que dichas
políticas ayudaron a salir de las crisis de 1929 y 2008, una de las potencias
mundiales vigentes hasta hoy y es por esto que es importante estudiar esta
corriente económica, a pesar de la dificultad y a pesar de las críticas que
lleva encima.
Referencias:
“La pertinencia actual de la Teoría General de
Keynes” por Federico Novelo U.
https://polimates.org/critica-del-modelo-keynesiano-desde-la-optica-moral-social-del-hombre/
Cristian Crucerira
Economía
UNA INEXPERTA PERSPECTIVA SOBRE KEYNES
Keynes
fue un economista de gran fama durante el siglo XX, pues logró transformar el
camino hacia el entendimiento de la relación entre la humanidad y el entorno,
en este caso material, que la rodeaba; a partir de lo que podríamos denominar
un “derrumbamiento” de la teoría de la escasez, que había venido siendo
promulgada por los economistas a quienes él hace referencia como “clásicos”. A
demás de esto se considera que su obra: la teoría general de la ocupación, el
interés y el dinero; es la base de los fundamentos de la teoría macroeconómica.
Pese
al argumento introductorio antes presentado, existían y siguen existiendo
personajes que se niegan a aceptar los planteamientos e ideas de Keynes como
medios creadores de revolución; ya que esto implicaría poner en tela de juicio
algunas de las fundamentales propuestas en que se sustentaba la economía
capitalista. Al analizar la situación anteriormente planteada y reconocer la
influencia de este economista, es posible llegar a comprender con mayor cercanía cuál ha sido
el verdadero efecto de su teoría en las políticas económicas hasta el momento
desarrolladas; así como también los desaciertos que este pudo haber tenido.
Las
expectativas que Keynes apaleaba, en cuanto a un estancamiento total de la
teoría clásica, no se consumaron; ya que, al inicio del siglo XXI, la teoría clásica
todavía profesa su dominio superior en cuanto a la teoría económica. Pero pese
a esto, Keynes aún no ha sido borrado; no obstante, su memoria muchas veces no
trasciende de manera suficiente como para retar a la teoría predominante.
Desde
la anterior y muchas otras perspectivas
se hace posible aseverar el hecho de que las sugerencias teóricas de este
economista han sido figura en la enunciación de algunas políticas económicas en
diferentes países; sin embargo para algunos, particularmente los voceros del
neoliberalismo, el keynesianismo no tiene otra significación que lo connote sino
como una parte del usufructo más enterrado del pensamiento económico; razón por
la cual hoy en día muchas de las
universidades han dejado de prestar mayor importancia a la enseñanza de su
teoría y en muchos casos incluso ha sido completamente descartado de sus
currículos académicos.
Es de reconocer que, como humanista, se
conserva de este el que en su legado permanezca aun la concepción de un enfoque
sobre el auténtico rol y tarea de la economía; esto explicado, porque
no, en la enseñanza de que de la escasez
o en cierta forma el temor a ella misma se le deriva cierta conveniencia para
las autoridades que ejercen poder. Podría ser entonces esta, la explicación del
por qué la deflación es la tentación eterno de la política, sin prestar
importancia si es suscitada por los estados nacionales u organizaciones supra naturales.
Así
mismo, Keynes al estar seguro de la ineficiencia de la teoría clásica, plantea
que se hace necesario dar solución a todas aquellas problemática que esta era
incapaz de solucionar, es así como se
hace resaltable también su método denominado “realismo lógico”, que bajo su
concepción debe emplearse para poder divulgar los auténticos elementos
principales de la economía capitalista, cuyo principio es el de la esencialidad
del dinero.
En síntesis y de cierta manera, Keynes fue un personaje de
pensamiento liberal afianzado, su contribución
de mayor importancia y significado, con relación a la economía, fue el progreso
de ciertos símbolos que figuraron en forma de una acción directa del Estado con
el propósito de poder inspeccionar y controlar los períodos de crisis,
asegurando que sus consecuencias fuesen lo más ligeros posibles y de forma aún
más transcendental, el aseguramiento para con los diferentes sectores de la
población y sociedad, de aquellos derechos primordiales que en muchas ocasiones
se ven afectados por las ineficaces decisiones impartidas por determinadas
políticas económicas. Es decir, que con él brota la concepción de Estado de
Bienestar, que debía cerciorarse del
aseguramiento de tales derechos, entre ellos el empleo y también vigilar y
promover el impulso de altas tasas de productividad, impulsadas por el incremento
del consumo.
Bibliografía:
Novelo, Federico (2016). La pertinencia
actual de la teoría general de Keynes. Economía UNAM, volumen 13 (número 38).
¡Llegó la hora!
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John Maynard Keynes, fue uno de los
economistas ingleses más influyentes del siglo XX gracias a su repercusión en
las políticas económicas, obtuvo
una beca para estudiar en el Colegio Eton. En 1902 ingresó en el King's
College en la Universidad de Cambridge, donde estudió matemáticas y teoría
de probabilidades, para finalmente optar por los estudios de Economía, en los
que tuvo como profesores a Alfred Marshall y Arthur Pigou, Su maestro había sido Alfred
Marshall, un liberal más bien ecléctico, el economista más influyente de su
época. Ricardo, Stuart Mill y toda la cátedra posterior hasta Marshall
acogieron la tautológica “ley” de Say de que toda producción creaba su
propia demanda; Rompió con la tradición y polemizó constantemente con su
representante Alfred Pigou. Formuló fundadas críticas a Ricardo y JB Say y se
enfrentó con los precursores europeos del neoliberalismo -los austríacos von
Mises y von Hayek- y el británico Lionel Robbins, de la Escuela de
Londres.
John Maynard Keynes fue “enterrado”
científicamente por los sepultureros del nuevo mainstream económico a fines de
los años 1970: el mismo que sigue dominando hoy cátedras universitarias de
Economía y gabinetes de estudio de importantes instituciones económicas. (La vigencia de Keynes- Carles Manera, Catedrático de Historia
Económica de la UIB).
Hoy he querido venir
hablar sobre alguien que debe conocer a nuestro amigo Keynes pero antes
recordarles un poco los sucesos que marcaron este 2018, que mejor que hacerlo
en este año que tenemos una transición de gobierno, las elecciones nos
presentaron dos candidatos en segunda vuelta representaban distintas miradas
políticas y económicas, por un lado estaba el representante del partido centro
democrático el señor Iván Duque Márquez un abogado egresado de la universidad
Sergio arboleda con inclinación política de derecha, y a Gustavo Francisco
Petro Urrego un Economista egresado de la universidad externado de Colombia con
inclinación política de izquierda, ya sabemos el resultado de las votaciones y
a quien eligió Colombia.
Iván Duque representa
el continuismo de las políticas neo-liberales aplicadas por su padrino político
Álvaro Uribe, por primera vez en décadas, se puso en discusión el modelo
neoliberal y emergió un movimiento ciudadano que fortaleció discursos
progresistas centrados en la restitución de derechos; el escenario para
Colombia es de profundización de las políticas neoliberales, en el marco de
presiones externas en la economía por los vaivenes de la política
proteccionista de los EE.UU; Las principales demandas sociales en la campaña
electoral fueron el cambio del sistema de salud, la ampliación del presupuesto
educativo, la modificación del régimen pensional y el desarrollo de la Reforma
Rural Integral derivada de los Acuerdos de Paz.
La elección de un gabinete tecnocrático y
neoliberal supone que estos temas serán abordados desde la perspectiva de que
esas demandas son servicios y no derechos de la ciudadanía, empeorando así las
condiciones actuales del sistema de seguridad social y educación, Duque debería
tener en cuenta las huellas del neoliberalismo, que marcan duras realidades y
condiciones de vida de la población colombiana, que se sienten en todo el país
y se expresaron en las elecciones, donde Gustavo Petro represento una fuerza de
oposición con más de ocho millones de votos y expresaron su descontento con la
continuidad de las erráticas políticas sociales del neoliberalismo y están
pidiendo el resarcimiento de derechos necesarios y vitales.
Después del nefasto
discurso del presidente del senado Ernesto Masías, que a mi parecer fue una
completa equivocación si el objetivo era atraer inversión extranjera al país,
quien va querer invertir en un país que según él esta llevado del carajo; vino
la presentación del nuevo ministro de hacienda Alberto Carrasquilla, que al
parecer no es tan nuevo como parece ya que fue ministro de hacienda durante el
gobierno de Uribe, con una de las propuestas que marcan su ideología, gravar con IVA los productos de la canasta
familiar.
Keynes comienza por analizar a los determinantes de la
demanda agregada, para él el mejor sustituto de la conocida Ley de Say, Keynes
definió como economía clásica supone que la inversión deriva de la abstinencia
en el consumo, él afirma que entre mayor sea la parte del ingreso que se gasta
de esta forma, mayor será el efecto (multiplicador) que la inversión tendrá
sobre el ingreso y, en último término, sobre la ocupación, Carrasquilla dijo en
el 2008 en el marco del congreso cafetero que “el salario en Colombia era
ridículamente alto” frase que traigo a recordar hoy, su propuesta fue bajarlo
aunque en ese año ya no se desempeñaba como ministro de hacienda, con la
intención de reactivar la economía en Colombia una reducción del salario con
una opinión muy personal, las consecuencias de una baja en el salario
representaría una menor proporción de ingreso para el consumo añadiendo a esto
un incremento del costo de la canasta básica familiar debido a los impuestos,
la población colombiana se vería en la necesidad de reducir el consumo,
considerando esto y una baja en los salarios podría pensarse que el ingreso se
destinaria a la canasta básica, y si la inversión se deriva de la abstinencia
al consumo está también disminuiría, menor seria el efecto del multiplicador y
el efecto de este en la ocupación; A sabiendas de que en Colombia la
informalidad “La proporción de ocupados informales en 13 y 23 ciudades y áreas
metropolitanas, en el trimestre abril-junio de 2018, fue 47,3% y 48,3%,
respectivamente”-DANE-, la posibilidad
de que personas empleadas formalmente se retiren para obtener posiblemente mayores ingresos sin la
necesidad de generar tributo, aspecto que reduciría los ingresos tributarios
del país por parte de un sector asalariado.
“Se sabe que detrás de estos incrementos de los
impuestos lo que viene es una disminución de las más grandes empresas del mundo
que operan en Colombia, eso es por completo inaceptable. Yo creo que avanza en
muy mala dirección del ministro Carrasquilla y el presidente Duque" (Jorge
Enrique Robledo).
El multiplicador (k) es igual al ingreso (Y) dividido
por el propio ingreso menos la parte de él destinada al consumo (c): k = Y / Y
– c; lo que es igual al ingreso dividido por la parte de él destinada al ahorro
(s): k = Y / s; como c y s son fracciones de Y, el multiplicador es igual al
recíproco de s, lo que permite afirmar que k será mayor entre mayor sea c. Si
se asume que el nuevo nivel de ingreso (Y´) es igual a la inversión I multiplicada
por el multiplicador (k), Y´ = I x k, resulta que un mayor nivel de consumo habrá
de generar un mayor nivel de ingreso, esta debería ser la consideración que
debería tener en cuenta el señor Carrasquilla, deberíamos presentarle a Keynes
porque pareciera que está buscando la solución por el camino equivocado, espero
y aspiro a que las decisiones del nuevo gobierno no afecte tanto a la población de clase media y baja que son
las más perjudicadas con las propuestas neo-liberales que pregonan estos
personajes.
El
momento Minsky (y, especialmente, el momento Keynes), ha llegado… desde hace 80
años. (NOVELO U. | La pertinencia actual de la Teoría General
de Keynes).
Referencias
http://www.celag.org/colombia-ivan-duque-toma-posesion/nte
(extraido 24/08/2018 6:45 pm)
Keynes,
John Maynard . The General Theory of Employment, Interest and Money [Teoría
General del Empleo, el Interés y el Dinero]. The
Collected Writings of John Maynard Keynes.
¡Keynes sigue vivo!
Julián
Andrés Palacios
Desde
una perspectiva económica, si tuviéramos que definir al siglo XX en pocas
palabras, “la batalla de las ideas” sería un título apropiado para una centuria
definida por el conflicto, que más allá de la beligerancia de dos guerras
explicitas y una encubierta, marcaría el duelo de los sistemas económicos
capitalista y comunista, en una encrucijada que como diría Keynes, demarca la
esclavitud del hombre practico a merced de algún economista difunto. Es así
como se presenta la lucha de las economías de planificación centralizada contra
las de libre mercado.
Ante
la gran recesión de 1929, la teoría clásica ortodoxa quedaba desarticulada
frente a un fenómeno para ese entonces inconcebible: la posibilidad del
equilibrio con desempleo. Es ahí cuando un rebelde economista de Cambridge lo
cambió todo. John Maynard Keynes logró explicar acertadamente el estado de
aquel momento que el capitalismo padecía. Primero, logró identificar la
categoría macroeconómica que explicaba la recesión, luego la modeló
acertadamente mediante una sencilla ecuación; D=C+I+G+EXPn. La demanda agregada
es igual a la suma del consumo, inversión, gasto público y exportaciones netas.
El estado de desempleo se podía solucionar incrementando la demanda agregada,
esto mediante la disminución de los impuestos, lo que aumentaría el consumo; la baja en los
tipos de interés, que aumentaría la inversión; el aumento del gasto público, y el
decremento de los tipos de interés que activaría las exportaciones. Pues bien
estás sencillas recetas no solamente fueron útiles, sino que le proporcionaron
al capitalismo sus años de mayor crecimiento, sus décadas de oro.
Lamentablemente
el modelo de Keynes sólo preveía dos resultados antagónicos, por una parte el
desempleo y por otra, la inflación. Es por ello que tras la llegada de la
crisis del petróleo en la década del 70, promovida por el alza en los precios
del crudo por parte de la OPEP, (un cartel petrolero de gran influencia
mundial), llegaron a ocurrir simultáneamente inflación y desempleo, en un
fenómeno conocido como estanflación. Así llegaba una época en donde la falta de
ocupación ya no venía por medio de la insuficiencia de demanda agregada, sino a
partir de sobrecostes vía del encarecimiento energético. Ante la imposibilidad
de una respuesta keynesiana frente a este fenómeno, “Keynes murió” para darle
paso nuevamente a la economía neoclásica, esta vez de la mano de Milton
Friedman y Friedrich von Hayek, los cuales detentaban mejores herramientas en
el marco del combate de costos desde el interior de la empresa.
El
sistema capitalista ha demostrado no ser ajeno a las crisis, la más reciente en
2008, ha suscitado el renacimiento de teorías alternativas que expliquen los
estados depresivos y contracíclicos del sistema económico, es ahí donde Keynes
vuelve a tener un espacio, demostrando que sus ideas ¡aún viven! Por ello a
continuación se explican sus planteamientos más relevantes y las razones de por
qué hoy en día tienen plena vigencia.
Keynes
establece los fundamentos de la demanda agregada, primero refutando la Ley Say,
que dice que la oferta crea su propia demanda, para introducir el concepto de
propensión marginal a consumir, el cual explica las cuotas que se destinan al consumo y ahorro por parte de los agentes económicos. El
ahorro puede realizarse en inversión, siempre y cuando la rentabilidad de la
inversión supere a la tasa de interés real, la rentabilidad de las inversiones
es la eficacia marginal del capital. Dentro de las alternativas a los usos del
dinero, la tasa de interés es clave en la determinación no sólo del ahorro y la
inversión, sino también de la especulación, pues Keynes creía que existía una
trampa de liquidez, es decir una preferencia por valores líquidos, que frenan
las políticas económicas del manejo de la base monetaria. En pocas palabras,
una política macroeconómica de expansión de la oferta monetaria, provee dinero
que no se destina al uso corriente del consumo y el ahorro, sino a la
especulación, que por la propia trampa de liquidez presiona al alza la tasa de
interés, por lo que la escasez de crédito lleva a la incertidumbre y al
descenso del consumo, en detrimento de la demanda agregada, acabando con los
incentivos a la inversión, previendo una nueva contracción y posible depresión;
esta es la crisis en el sistema keynesiano.
Todos
estos planteamientos renacen si nos ponemos a observar, que la carencia de
demanda efectiva y los motivos especulativos son los causantes de una nueva
crisis que afronta el mundo. 2008 es conocido como el año de la crisis de las
hipotecas subprime, una hecatombe producida por las altas ambiciones del
capital y un mercado financiero desregularizado que se prestaba fácilmente a
los mayores intereses especulativos. Por otra parte las presiones de austeridad
que exige la unión europea, restringen la demanda de los países más afectados,
que se les exige el cumplimiento de unas cuotas en nombre de la estabilidad, a
costa de un desempleo rampante, que podría obtener ayuda considerable si se
reconsiderase la teoría keynesiana. Nuevamente el mundo afronta un vació en la
teoría económica, los mercados libres de la escuela neoclásica están fallando,
y Keynes reclama su sitio en el panteón de aquellos que creemos que al igual
que existen fallas de estado, también las hay de mercado, de los que creemos
que no hay respuestas absolutas. La teoría económica es más una colección de
teorías útiles que una ley concluyente, es por ello que podemos decir en nombre
de la diversidad y la heterodoxia que ¡Keynes aún vive!
Bibliografía
Novelo,
F. (2016). La pertinencia actual de la Teoría General de Keynes. ECONOMÍAunam, 13(38), 41-60.
Pavón,
J. [UPM]. (2010, Abril 5). Muerte y resurrección de Keynes (subtitulado en
inglés) [Archivo de video]. Recuperado de https://www.youtube.com/watch?v=mk6vgZGdar8
Dual.
[Victor Milan]. (2011, Julio 1). La Batalla por la Economía Mundial 1 de 6 |
Versión Completa [Archivo de video]. Recuperado de https://www.youtube.com/watch?v=cD2u437fGJM&t=178s
POSTULADOS CLASICOS FRENTE AL PENSAMIENTO KEYNESIANO
LAURA
CAMILA PAZ GUZMAN
John Maynard Keynes fue un
economista británico, considerado como uno de los más influyentes del siglo XX.
Su pensamiento económico y posteriormente desarrollo de su teoría económica
entra en auge como respuesta a una gran crisis de momento llamada “Gran
Depresión”, expresada en su libro ´TEORIA GENERAL DE LA OCUPACIÓN, EL INTERES Y
EL DINERO´. Así entonces, esta teoría surge como respuesta a periodos en épocas
de crisis o recesión, en donde la intervención
del gobierno es fundamental para solventar dichas épocas.
A partir de esto, Keynes,
entra a contrastar su pensamiento económico frente al pensamiento económico
clásico, donde partirá por exponer que el mercado NO se regula por sí mismo,
sino que necesita la intervención del gobierno, proponiendo políticas de
fomento del trabajo, redistribución de ingresos, subsidios, entre otras. Por
otra parte, cuestiona qué determinará el volumen de ocupación, exponiendo que
el pensamiento clásico está basado en 2 postulados fundamentalmente: el salario real es igual al producto
marginal de trabajo lo cual determinara la demanda de ocupación, y la
utilidad del salario con un determinado volumen de trabajo es igual a la
desutilidad marginal de ese mismo volumen de ocupación lo cual determinara la oferta de ocupación.
Keynes coincide con el
primer postulado y comparte la idea de que en un corto plazo, conociendo el
capital de la empresa y el estado de la técnica, a medida que el volumen de
ocupación aumente, se presentaran rendimientos marginales decrecientes que
harán que a partir de cierto nivel de producción la productividad marginal
empiece a disminuir, por tanto los empresarios contrataran trabajadores hasta
que el ingreso que le genera la unidad adicional producida sea igual al costo
de la unidad contratada. Así entonces la norma de contratación del empresario
se da de la siguiente manera:
1.
Si
el salario real es mayor al producto
marginal del trabajo, su demanda de ocupación baja, por ende no contrata.
2.
Si
el salario real es menor al producto
marginal del trabajo, su demanda de ocupación aumenta, por ende tiene
incentivos para seguir contratando.
Así entonces, un
incremento en el empleo solo es posible de una disminución en el salario real.
Para el segundo
postulado, Keynes deja claro el concepto de desutilidad como “motivo que induce
a un hombre o a un grupo de hombres a abstenerse de trabajar antes que aceptar
un salario que represente para ellos una utilidad inferior a cierto límite”,
esto explica que las personas tenderán a aceptar determinado salario siempre y
cuando se les compense la insatisfacción que les genere renunciar al ocio o
estar en el trabajo correspondiente, llamándose esta desutilidad COSTO DE OPORTUNIDAD.
Keynes rechaza la
validez de este postulado puesto que aunque sea compatible con las clases de
desempleo clásica, no lo es con la existencia de un desempleo ‘involuntario. También
lo hace con la afirmación de que una disminución del salario real, por un
aumento en los precios, cuando los salarios nominales permanecen inalterados,
forzaría una disminución de la oferta de trabajo al nivel del salario
corriente, abajo del volumen de empleo anterior a la subida de los precios.
Keynes plantea que cuando los salarios disminuyen, los ofertantes de trabajo
(empleados o no empleados) no reducirán dicha oferta, e incluso estarían
dispuestos a trabajar por un nivel de salario más bajo.
Además de esto, los
clásicos establecen el salario real, mientras para Keynes solo se puede
estipular el salario nominal, puesto que estos dos coincidirán solo en una
economía neutral. Por tanto al ser dos cosas diferentes el salario real y el
salario nominal se puede llegar a situaciones en las que el salario nominal
disminuya y el salario real aumente debido a una baja del nivel de ocupación y en otra situación, que el salario
nominal aumente y el salario real disminuya debido a que el rendimiento marginal es mayor cuando
disminuye la producción, teniendo en cuenta que para ambos casos el precio
no es constante.
LA GRAN DEPRESIÓN Y EL SURGIMIENTO DE UN NUEVO PENSAMIENTO
Diana
Carolina Yarpaz
La crisis económica que se presentó
en Estados Unidos y se extendió al resto de los países como es la gran
depresión, trajo consigo rupturas en la economía; El presidente que en ese momento
era Franklin adoptó algunas posturas “estrategias” de Keynes que se habían dado
a conocer en su libro “la teoría general sobre el empleo, el interés y el
dinero” con el objetivo de disminuir los problemas que había ocasionado como la
disminución en la renta nacional, los ingresos fiscales, los precios, y el
aumento en el desempleo.
EE.UU conto con el apoyo del
Estado de bienestar, donde el sistema económico, político y social se
desarrollo alrededor de la intervención del Estado, con la intención de
garantizar acceso a beneficios sociales a la población en general; a partir de ello surgieron nuevas
organizaciones que apoyaban al trabajador ofreciéndole una estabilidad
económica y social, y es lo que básicamente se postuló en el 2008 en el estado
de bienestar de Keynes, que para ese entonces no existía, pero las ideas que
propuso apoyaban a las instituciones y a las políticas económicas que debían
ofrecer un respaldo a la seguridad social
y al progreso de los ingresos laborales, un plan de rescate que se propuso para mantener una estabilidad
en la economía y que con ayuda de otros planes propuestos por otros autores la
economía de Estado Unidos creció fuertemente.
El Estado de bienestar que
bien está representado por el plan Wisconsin, llamo la atención de Keynes, pues
consideraba que las aportaciones de John Commons eran significativas, así el
plan Wisconsin trataba de “una ley de administración
pública de Estado de características progresistas, una normatividad eficaz de
tarifas de los servicios públicos, una limitación de los intereses crediticios,
una política de apoyo al movimiento sindical de los trabajadores, un impuesto
sobre la renta, y, por último, en 1932 un sistema estatal de subsidio al
desempleo” (Novelo, 2016) .
Por otro lado, el modelo de
Keynes no podía satisfacer las necesidades de los otros países, ya que es
considerado un modelo eficaz pero no para todas las economías por ser
estrictamente distintas; así lo resalta Joseph Schumpeter, “el Keynesianismo es
una semilla que no puede ser trasplantada a suelo extraño: cuando así se hace,
muere, y antes de morir se vuelve venenosa”.
Para Keynes el problema que
surgía de la crisis era la deflación donde los costos superan los beneficios y
eso permite que se pierda el incentivo a invertir lo cual no es bueno para el
desarrollo de una economía, pues se verá estancada; otro problema que destaca
es la asimetría que se puede presentar, como en las caída de las precios en
alimentos y materias primas básicas, donde su recuperación es lenta pues el
fenómeno actúa de manera rápida; de esa manera la depresión como lo expresaba
Keynes no se solucionaba reduciendo salarios ni costos, ni la oferta, tampoco
la elevación de los precios, es decir no era adecuado intervenir con las
llamadas soluciones de mercado de la sabiduría económica convencional.
El sistema económico de
Keynes comprende la propensión marginal a consumir, la eficacia marginal del
capital y la tasa de interés, y a su vez el nivel de ingreso y el volumen de ocupación; respecto a la
primera, Keynes analiza algunos determinantes de la demanda agregada, es aquí
donde se puede observar que es importante el ingreso, ya que parte del ingreso
es destinado al consumo, también se puede considerar que parte de ese ingreso
puede ser ahorrado, si hablamos de la inversión y no de consumo pues se ve un
rendimiento creciente a futuro, de esta manera Keynes resalta el efecto
multiplicador que se presenta en lo que denomino la función de consumo, este
efecto multiplicador se trata de que al realizar inversiones se incrementa la demanda de trabajo, el cual le
genera un ingreso al trabajador y permite que haya mas dinero para gastar
(comprar), y así los empresarios estarán motivados nuevamente a invertir y
producir mas bienes y así generar mas empleo, lo que permite que se reduzca la
desocupación.
Ahora bien, la eficacia
marginal del capital se trata de que parte del ingreso que no es destinado al
consumo sino al ahorro se lo llevara a la inversión como lo expresa el Profesor
Irving Fischer “Es la tasa de descuento que, en el tiempo, iguala a los
beneficios esperados con el precio de oferta de bienes de inversión” (Novelo,
2016). De esta manera el keynesianismo
sostiene que los componentes de los ingresos nacionales son el consumo, la
inversión y los gastos del gobierno, por lo tanto, el nivel de consumo depende
del nivel de ingresos, la inversión depende de las esperanzas de los
inversionistas y los gastos del gobierno se relacionan con los niveles de
consumo e inversión y tiene un efecto multiplicador de los ingresos. (Ramirez,
2015) .
Para Keynes la tasa de
interés era el pago que había que hacer a alguien para hacerle renunciar a la
preferencia por la liquidez; Irving Fisher apoyo a Keynes ya que consideraba
que la tasa de interés era determinante de los aspectos de la vida económica de
las naciones; así la tasa de interés no es un precio sino que su relación es de
dos precios: la apreciación subjetiva sobre el precio presente y el precio
futuro de la misma mercancía (Pontón, 2013) .
Novelo, F. (2016). La Pertinencia
actual de la teoria keynesiana. Mexico: Economiaunam.
Pontón,
R. (2013). Keynes, el ahorro y la tasa de interés. Bolsa de Comercio
de Rosario.
Ramirez,
E. (15 de enero de 2015). La gran depresión de 1930 y el keynesianismo.
TEORÍA GENERAL, DETRÁS DE UNA ESTRUCTURA EN DESEQUILIBRIO
Alice
Juliana Molano Muñoz
La identificación de los
aspectos marcados para la evolución de la teoría Keynesiana, datan de hechos
históricos, para los cuales es claro el contexto que tuvo como referencia
Keynes. En el presente ensayo, se desea dar una mirada analítica a la vigencia
de esta escuela, tomando como referencia “La pertinencia actual de la Teoría
General de Keynes” de Federico Novelo, el cual esboza una mirada actual del
método Keynesiano, sobreviviente por ocho décadas.
Entiéndase por estructura los
lazos de los cuales se ha establecido lo que hoy por hoy conocemos como
sociedad, ya sea forjada por distintas culturas, ideologías, teorías, entre
otros. Este trabajo se encaminará a las ciencias económicas como un conjunto y
no como la suma de sus partes. Es de suma importancia traer a colación esta
“estructura” ya que como se observa en el artículo los lazos están dados por
unos canales, que desde mi punto de vista son hechos históricos que conforman
la piedra angular para revisar la vigencia de la teoría Keynesiana, estos son:
la gran depresión y la crisis del 2007. Entre ellos hay un camino de ideas las
cuales fueron básicas para dar solución. ¿Cuál es la importancia de repensar la
evolución la teoría Keynesiana en dicha estructura? ¿Las ideas de esta teoría,
desde que dimensión han sido vistas?
No hay mejor comienzo que
dar meritó al desarrollo de dicha escuela por y como lo nombra (Novelo, 2016), partiendo de la historia,
política y teoría. Bases de las cuales se tiene como principal motivo la
inequidad existente del capitalismo, para contrarrestar esta situación durante
la Gran Depresión, nace la necesidad de crear un Estado de Bienestar, la pronta
adecuación de la historia naciente en esta escuela, brinda el respaldo tan
pronto a este Estado de Bienestar, partiendo de la intervención del Estado en
las economías, especialmente la norteamericana que poco después se convertiría
en una fuerza económica mundialmente conocida. Pese a los esfuerzos de la
escuela ortodoxa por derrocar esta idea de la intervención del Estado, las ideas
de Keynes brillaron, por los aterrizados planteamientos propios de la época.
Por lo anteriormente
mencionado la concepción de repensar esta teoría se constituye por los aportes
partiendo de justificaciones solidas que la escuela ortodoxa paso y ha pasado
por alto. (Chang, 2016 ) brinda una
perspectiva del por qué Keynes fue el economista más destacado del siglo XX.
Con la pregunta que plantea (Chang, 2016) “¿Una teoría económica apta para el
siglo XX… y más allá?”, da los primeros indicios del por qué son planteamientos
con justificaciones sólidas, para los clásicos el igualamiento del ahorro y la
inversión dificultó la consecución del pleno empleo, es por ello que la teoría
macroeconómica Keynesiana reconoció la separación entre inversionistas y
ahorristas, además del destacado papel que jugaron las finanzas en la
comprensión de la Gran Depresión y la Crisis del 2007. Por ende, esta teoría
supo leer la economía ya avanzada del siglo XX.
Es por ello, que la lectura
de Keynes fue fundamental para las contribuciones no solo teóricas, sino
también en la praxis, que como lo menciona (Kicillof,
2007) sus mayores aportes se basan en las agudísimas críticas a la
teoría clásica y la búsqueda de fundamentos teóricas distintos de los que
ofrece la ortodoxia. Keynes, al examinar la inequidad del capitalismo, presenta
un claro rechazo a la opinión de Smith, en cambio, buscó explicaciones del
supuesto equilibrio fomentado por los clásicos entre la oferta y demanda del
mercado, como falla de mercado. En consecuencia, surgió una importante
trascendencia en la teoría de la liquidez, con celebres ideas en relación al
consumo, la inversión y el dinero.
La trama de la liquidez fue
acuñada por Keynes, esta se considera como la reacción de variables
independientes del sistema económico (tasa de interés), frente a incrementos de
la oferta con el fin de reducir el precio del dinero. El supuesto de Keynes
favorece la inversión, la ocupación, el ingreso y ahorro como incremento. La
liquidez jugó un papel importante para el estallido de la Gran Depresión, es
por ello que en la Teoría General está en un primer plano. La especulación
formó parte para esta teoría de la liquidez por lo cual la escuela clásica al
no fijar propios planteamientos en las finanzas, hizo que la inversión se
transformará en especulación, ello dio paso a un colapso. Al fijar un reconocimiento
de la historia, esta teoría se ubica en diferentes dimensiones, aunque para los
contradictorios, no se debía suponer una teoría general ya que sólo se reconoce
a corto plazo y las variables macroeconómicas representan a largo plazo un
fallo, por ejemplo, en cuestión tecnológica. Su representación teórica, además
de su vigencia en aspectos positivos, también tiene que ser repensada en cuanto
a un conjunto de doctrinas heredadas.
Para finalizar, en cuestión
de permanencia de esta escuela en pleno siglo XXI, es importante fijar que aún
el debate persiste, ya que si bien es cierto muchos planteamientos en la
política están vigentes, pero hay variables a reconocer hoy en día como lo son
la demografía y tecnología que necesitan fijar entornos plausibles para el desarrollo.
Sin embargo, esta teoría al sentarse en un siglo histórico decisivo, reconoce
el contexto que da punto de partida a lo que se “necesita”. En cambio, la
escuela ortodoxa al no reconocer ramas de las ciencias sociales como lo son la
historia, ha pasado por alto lo que se avecinaba, una crisis ambiental que es
un tema de este siglo, que además necesita de intervención del Estado para la
generación de políticas públicas para contrarrestar esto, tal vez sea posible
que la teoría Keynesiana surja de nuevo, por ello está detrás de una estructura
conocida por desequilibrios.
Bibliografía
Chang, H.-J. (2016 ). Economía para el 99% de la
población. Barcelona: DEBATE .
Kicillof, A. (2007). Fundamentos
de la Teoría Genreal. Las consecuencias teóricas de Lord Keynes . Buenos
Aires : EUDEBA.
Novelo, F. (2016). La
pertinencia de la Teoría General de Keynes. ECONOMÍAunam, Vol. 13 núm
38, mayo-agosto.
LA HISTORIA, PARTE FUNDAMENTAL DE LA TEORIA GENERAL
104412010837
Los blancos predilectos de los
conservadores se apoyaron en la interpretación monetaria del ciclo económico de
los años 60 y 70 basados en una expansión monetaria, Política fiscal, estado de
bienestar, regulaciones económicas gubernamentales e intervencionismo económico
del Estado que con el tiempo los llevó a hacer parte de la crisis que arrancó
en el 2007. Galbrarth Data explica la evocación del estado de bienestar como protagonista de la
construcción técnica del siglo xx, siendo
este la figura política representativa del capitalismo.
Todo comienza en los años 80, cuando
se impuso el neoliberalismo aparecido después de la primera guerra mundial en
el que limita la intervención del Estado en asuntos jurídicos económicos (Actualización
del liberalismo) en los países centrales de la época.
Con el tiempo dichos modelos de
desarrollo económicos se vieron afectados y entraron en crisis generando
desocupación y marginalidad., como medida entra con fuerza las ideas de un
economista británico con su obra más representativa y conocida la teoría
general del empleo, el interés y el dinero Jhon Maynard Keynes, consideraba que
el sistema capitalista no tendía al pleno empleo ni al equilibrio de los
factores productivos, por el contrario tiende a un equilibrio que sólo de forma
accidental coincidiría con el pleno empleo. Destacó la oferta agregada como
contraposición de la visión clásica y de la inestabilidad de su modelo de
demanda agregada proveniente de los mercados privados. Su principal análisis,
es una apuesta por la intervención pública directa en materia gasto público que
permite cubrir la brecha o déficit de la demanda agregada y describir el
sistema económico y sus problemas.
En Alemania temían por el rápido
crecimiento de la clase obrera por sus ideas revolucionarias guiados por Karl
Marx y el alemán Lloyd George ministro de Hacienda de Gran Bretaña quien adoptó
en 1911 leyes donde se implantaron seguros oficiales de enfermedad e invalidez
y de desempleo y solo en 1927 llegó a existir en Alemania un seguro de
desempleo donde cinco lustros mas tarde lo siguió Estados Unidos.
En dicha época también existieron
autores representativos que con sus ideas pretendían dar solución a las
diferentes crisis en aquel tiempo y aunque algunos no tuvieron éxito como lo
fue Commons quien no contó con muchos lectores, tuvo efecto en actitudes
económicas y políticas de Estados Unidos integrado por una Ley de
administración pública del Estado de características progresistas guiado por el
plan Wisconsin conformado por economistas del equipo Commons y de la universidad
de Wisconsin. En dichos términos cabe recalcar el aporte de este autor puesto
que fue el único de la época con quien Keynes estuvo de acuerdo como él definía
a las instituciones como la acción colectiva para el control de la acción
individual.
Con lo anterior dicho, Thomas Piketty
apoya la idea de Commons sosteniendo que en todos los países del siglo XIX los
impuestos representaban menos del 10% del ingreso nacional y hasta la primera
guerra mundial, es decir que había muy poco o baja participación del Estado en
la vida económica y social, pues sólo del 7% al 8% el ingreso cumplía con las
grandes funciones de todo el gobierno., es por ende que en especial los
servicios públicos de educación y salud accesibles para la mayoría de la
población eran bastante rudimentarios. Sólo a partir de 1920 - 1930 y 1970 - 1980 aumentó el ingreso nacional
en por lo menos 3 o 4 veces para invertir
en gasto público y en especial gasto social lo que generó una estabilización
hasta el año 2010.
En dichos términos la teoría general
corresponde a uno de los más intensos momentos de reflexividad entre la
relación pensamiento y realidad, por ello entra como solución a las crisis que
con el tiempo se volvieron una bola de nieve al limitar la participación
estatal y aunque fue muy criticada por su publicación tan apresurada por su
difícil comprensión y al parecer por exagerar la novedad de su enfoque y
desarrollo, fue y aun sigue siendo de mucha ayuda para sus colegas y para
llevarlo acabo en el modelo de desarrollo del momento, pues aunque las ideas de
algunos intelectuales sean correctas o
equivocadas muchos se convierten esclavos de dicha influencia. Pero muchos de
los economistas también piensan que la
teoría keynesiana es guiada para la desaparición de un supuesto monopolio
privado en la generación de empleo al crear ocupación y por otro lado hecha
para los ricos al no ser sensiblemente gravados porque para Keynes ellos son
los únicos creadores de empleo, convirtiéndose en la mas inquietante pesadilla
del amplio espectro conservador, hecho que hoy en día con el modelo de
desarrollo en Colombia pretenden llevar a cabo.
Aunque la teoría en principio ha sido utilizada para la generación de empleo,
Kicillof dice que esta también ha sido una construcción en la crítica de la
economía clásica y en la búsqueda de unos fundamentos teóricos distintos de los
que ofrece la ortodoxia.
«En cualquier caso afirmo con
seguridad absoluta que lo único que podemos hacer es descubrir alguna excusa
que aun las cabezas huecas consideren legítima para incrementar ampliamente el
gasto» (Keynes, 1932: 521-526)
Con ello podemos decir que la teoría
general a pesar de sus críticas y quizás sus errores o ideas sin fundamento ha
sido y sigue siendo de mucha ayuda para lograr la solución de muchas crisis
económicas, políticas y sociales que se han generado con el paso del tiempo,
pues con la participación de muchas variables ha logrado entender, comprender
el comportamiento de lis diferentes agentes económicos.
La ocupación según la Teoría de J.M. Keynes
En nuestra sociedad siempre ha existido desde el punto de
vista económico el problema de la escasez entendiéndose este concepto como esa
incapacidad de satisfacer los deseos, y que
desde la teoría económica se ha
tratado de buscar unas posibles soluciones; es así que al hacer un recorrido a
través de la historia económica entre los precursores tenemos a los teóricos
clásicos, siguiendo de manera general con los neoclásicos, marxistas, y
posteriormente llegando a Keynes un economista del siglo xx, que a diferencia
de los clásicos, se concentra en encontrar solución al problema que se estaba
presentando en Estados Unidos en 1929
conocida también como la gran depresión, dando lugar de esta manera al
pensamiento keynesiano que se basa en los conceptos neoclásicos que tuvieron en
algún tiempo gran incidencia, y que aun la tiene incorporándose en modelos
económicos claro está que haciendo ciertas modificaciones y Un ejemplo muy
claro puede ser el modelo neoliberal, que tiene como principal condición
establecer un mercado libre es decir, donde haya poca intervención del gobierno
tratando de que el mercado se autorregule.
Centrándonos en los importantes enunciados hasta ahora leídos
en los dos capítulos de la gran obra de Keynes llamada,”Teoría general de la
ocupación, el dinero y el interés”. Podemos rescatar varias cosas: lo primero
que nos recalca Keynes es que esa gran dominación por parte del pensamiento
neoclásico había que analizarlo teniendo muy en cuenta que en su modo de
desarrollar una teoría general lo que debía hacer era tener presente que solo
se podía contar con los clásicos de una manera especial, pues a pesar de ser
una teoría bien fundamentada, no se acomoda completamente a la vida real, pues
esta no funcionaba al pie de la letra ya que, muchas de sus condiciones se
desplomaban al aplicarlas, puesto que puede ocurrir que alguna sociedad se
encuentre como siempre; con diversidad de fenómenos, lo anterior no siendo
extraño ya que somos una sociedad de muchos, en donde cada uno de los
individuos actuamos de manera diferente.
Entre los postulados
de la teoría clásica (neoclásica), están: que el salario es igual al producto
marginal del trabajo y que la utilidad del salario es igual a la desutilidad
marginal del volumen de ocupación. Supuestos que hacen alusión en primer lugar
a la ocupación de los recursos disponibles (factores de producción), más
específicamente el factor trabajo en donde la mayoría de las personas muchas
veces no están de acuerdo a su remuneración puesto que, no creen que es lo
correspondiente frente a las producciones que realizan, esto según los que
ofertan la mano de obra, los cuales tratan siempre de estar enganchados a algún
tipo de actividad remunerativa para así de esta manera obtener ingresos y a su
vez ganarse la vida, por lo menos con las cosas más básicas para poder
sobrevivir. Es así, como en nuestro país
esto aún sigue siendo un problema, el de la distribución del ingreso,
muchas personas se tornan angustiosas pero a la vez sostenidas ante tal
situación. Porque aunque unos no estén trabajando por cuestiones como lo dice
nuestro autor a estudiar: voluntarias, involuntarias o friccionales, existirán
otras que no les importara tales condiciones y estarán dispuestas a trabajar así
sea por una miseria. Lo harán. Estos son aspectos muy visibles y por lo tanto
no desconocidos ante la sociedad, tanto es asi que dejando a un lado las decisiones
individualistas, estos trabajadores se ponen de acuerdo colectivamente fijando
un salario nominal sin la opción de
reducirlo y dada una disminución de este, las ocupaciones, actividades, labores
cesaran. Ahora bien, en el caso de los demandantes de recursos, se debe saber
que también buscan un fin que es el de mantener mano de obra útil que deje
buenas productividades a un costo bajo. Aunque creo que estos empresarios
generadores de empleo deben saber que el salario a pagar debe ser suficiente
para que los asalariados tengan la condición necesaria para poder comprar
bienes y/o servicios de consumo, de tal manera que haya una coherencia en todo
este ciclo.
Aunado a lo anterior con respecto a la oferta y demanda de
recursos, existe una obstrucción de las partes en cuanto a los intereses porque
de algún modo, la tendencia de ambas es distinta, por eso es que de cierto modo
se busca un equilibrio para no formar discusiones. Pero lo que últimamente se
ha visto es todo lo contrario un descontento por parte de los operarios. Que
aunque no estudian economía son muy razonables en cuanto sus costos vida, sabiendo
elegir y decidir lo que más les convenga y atraiga bienestar.
Dicho todo esto, se puede concluir que existen muchas
variaciones en el contexto del mercado, donde en sentido alguno nada es
constante como lo suponen los clásicos, dando como consecuencia en el caso del
mercado libre, al no poderse regular, estar en la necesidad de hacer participe
en estas cuestiones de mercado y
economía la intervención del Estado que a través de políticas pueda resolver
variados problemas.
Bibliografía:
Keynes, J. M.
(2014). TEORIA GENERAL DE LA OCUPACION, EL INTERÉS Y EL DINERO. Mexico-
Buenos Aires: FONDO DE CULTURA ECONOMICA.
Cod. 104417011293
VIGENCIA DE LA TEORÍA GENERAL DE KEYNES
La contribución hecha
al pensamiento económico por parte de John Maynard Keynes en el texto ‘La
teoría general de la ocupación, el interés y el dinero’, confirma la postura
compartida por la mayoría de los economistas, y es que divide la historia en
dos. Critica a los clásicos y Los Marginalitas, pero propone un modelo alternativo que fue dominante
durante más de 150 años, el cual plantea
una profunda intervención del estado en la vida económica, ya que como Keynes
lo demuestra, el mercado es incapaz de auto regularse y también años atrás
afirmado por Adam Smith cuando hacía alusión a “la mano invisible”.
Para hablar de lo
propuesto por Keynes, es importante en primer lugar decir que su teoría se
construye a partir de un análisis riguroso de la realidad social y económica de
los años posteriores a la primera guerra mundial, en los cuales Estados Unidos,
salió victorioso y con una economía aparentemente robustecida, de esta manera
se generó un exceso de confianza en los empresarios e inversionistas, que tuvo
como resultado una crisis de sobre producción, las mercancías se acumularon,
bajaron sus precios, se redujo la producción y finalmente se generaron despidos de
trabajadores, el valor de las empresas cayó y en octubre de 1929, se declara
oficialmente la quiebra en Wall Street. Las fuerzas del mercado son incapaces
de reencontrar el equilibrio y en los postulados clásicos no se contemplan
respuestas a una crisis como esta.
Es sobre esta
realidad que Keynes construye las ideas que explicarán las razones de la
recesión y el desempleo prolongado, no sólo ocupándose de explicar cómo se
llegó a la crisis, si no, proponiendo además una solución para superar la
misma, en la que era fundamental la participación del estado como regulador del
mercado y garante de una redistribución adecuada del ingreso, que como lo
veremos más adelante, ha generado
intensos debates entre quienes defienden la supremacía del mercado, en
cualquier forma de organización social.
Keynes parte por
derrumbar los principales postulados Marginalitas, entre ellos la forma como se
analiza el desempleo, lo cual para Los Marginalitas podría ser voluntario cuando
las personas prefieren el ocio a emplearse o también por las regulaciones
salariales existentes, si estas no existieran los salarios podrían bajar al
punto que el desempleo desaparecería. Por otro lado el desempleo podría ser también involuntario, como el
tiempo que le podría llevar a una persona encontrar un empleo, además
consideraban que este se daba sólo de forma transitoria. Keynes en contra
posición a esto plantea que el desempleo involuntario si puede ser permanente,
porque a pesar de que los salarios sean bajos, no se logra emplear al conjunto
de la población, esto a razón de que la demanda efectiva es insuficiente.
De esta forma podemos
pasar a discutir una de las principales contradicciones entre Keynes y Los
Marginalitas. El papel que juega la oferta y la demanda en la economía para los
segundos, es que toda oferta crea su propia demanda, lo que se conoce como la
ley de Say, sin embargo Keynes lo contradice porque plantea
que es la demanda la cual crea la oferta, pues no es cierto que todo lo que se
produce se vende (como ya había quedado evidenciado en la crisis del 29). Por
lo tanto el análisis de la demanda es central. La demanda se divide en consumo
e inversión; el consumo depende del ingreso de las familias, la cuales no gastan
todo su ingreso en consumo ya que destinan una parte de este para el ahorro. La
ración del ingreso que se destina al consumo, se denomina propensión al
consumo.
Así mismo cuanto
mayor sea el aumento en el ingreso, menor será la propensión a consumir, en
cambio optaran por destinar una mayor parte de su ingreso a ahorrar. También según el análisis hecho
por Keynes en las sociedades donde la distribución del ingreso es desigual, la
propensión al consumo es menor que en las sociedades igualitarias, porque la
mayor parte de la riqueza se concentra en las clases privilegiadas que destinan
al consumo una parte menor del ingreso que las clases menos privilegiadas, lo
que hace que la demanda efectiva se reduzca y la producción se contraiga. por
esto Keynes propende por la redistribución del ingreso en beneficio de las
clases menos favorecidas, esto impulsaría el consumo, la demanda efectiva, la
producción y el empleo; reactivando la economía.
Teniendo en cuenta
esto el estado debe ser el principal impulsor de la demanda efectiva, para esto
cuenta con dos herramientas: la política fiscal y la política monetaria, la
primera se compone por los impuestos y el gasto público, esta última a través
de la inversión en infraestructura, estimulando el empleo, la demanda y la
producción. Esta propuesta presenta resistencia principalmente por el sector
privado, debido a que se considera el principal generador de empleo y gracias a
esto debe recibir beneficios tributarios por parte del gobierno que los motive
a contratar más trabajadores. Pero como ya ha quedado demostrado ni la
reducción de impuestos, ni la reducción de la oferta con el fin de elevar los precios,
ni la reducción salarial para disminuir los costos son garantía de generación
de empleo y no generan efectos considerables en momentos de contracción del
consumo.
A pesar de las
grandes resistencias, por parte de ciertos sectores que propenden por la no
intervención del estado en el mercado, ha quedado demostrado históricamente, en
primer lugar que debido a la no regularización del mercado, las crisis
económicas se vuelven inherentes al sistema capitalista y es en este hecho
donde se reafirma la vigencia e importancia de los postulados Keynesianos, los
cuales han probado su eficacia para la reactivación de las economías en tiempos
de recesión.
Andrés Camilo Díaz Londoño
104412010371
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